jueves, 25 de julio de 2013

ACCIDENTE FERROVIARIO: EN RECUERDO DE LAS VÍCTIMAS

"El dolor tiene un gran poder educativo; nos hace mejores, más misericordiosos, nos vuelve hacia nosotros mismos y nos persuade de que esta vida no es un juego, sino un deber". Cesare Cantú

Desde HUMANISMO Y VALORES queremos trasladar todo nuestro apoyo y cariño a las víctimas y familiares del accidente ferroviario de Santiago de Compostela del pasado 24 de julio.

Que la dureza de estos momentos sirva también para recordarnos una vez más que la mayor y peor crisis no es la económica –por más que la mayoría suframos sus rigores-, sino la que atañe a la conservación de la propia vida, a los valores humanos en los que se fundamenta y a nuestra sensibilidad frente al dolor de los demás. Una sensibilidad que en no pocas ocasiones permanece adormilada en el regazo de nuestro egoísmo y entre los pliegues de nuestra incapacidad para pensar en el bien común, hasta que alguien nos sacude el alma y recuperamos la consciencia y la conciencia. A veces son esas víctimas las que nos tienen que sacar del letargo en el que estábamos sumidos, en un acto de heroísmo póstumo, en donde la frontera entre lo que parece estar pasando y lo que de verdad ocurre, queda difuminada en el marco de nuestra humanidad extraviada. A veces también son esas mismas víctimas las que nos sacan a los demás de entre los hierros retorcidos de nuestro tren... de nuestro tren de vida. 

Quizás algún día, la misma sensibilidad y generosidad que con frecuencia somos capaces de demostrar de manera puntual ante el sufrimiento sobrevenido, sea la que guíe nuestras vidas en todo momento; probablemente seguiremos sin poder evitar que de tanto en tanto suceda algún terrible accidente, pero tal vez entre todos consigamos que el día a día y hasta la propia vida, dejen de ser una verdadera tragedia para millones de seres humanos.

Nada puede sustituir a un ser querido que se ha ido; nada puede reemplazar a un padre, una madre, un hermano, un hijo o un amigo arrebatados por la muerte. Pero el efecto que su memoria, que esa vida, que esa huella indeleble de dolor deja en cada uno de nosotros, si puede servir para recordarnos que nada nos es más preciado que la parte afectiva de la vida; que el amor que profesamos a los demás y el que recibimos de ellos es nuestro mayor tesoro y que aquello que verdaderamente echamos de menos cuando nos falta, no es lo que podemos tocar o contar, sino a los que podemos abrazar... Y a esa fuerza invisible e intangible que nos une para siempre a las personas que comparten la vida con nosotros.

Por Alberto de Zunzunegui


domingo, 30 de junio de 2013

MARCEL CARNÉ Y PARÍS

Ése es el lugar. Aunque me aguarden miles de hermosísimos, pintorescos, salvajes, plácidos, extremos, o desoladores parajes por conocer, el único destino al que siempre vuelvo, con emoción renovada, es a Paris, y lo hago convencida de que toda la comedia y la tragedia se inventó allí, en una u otra época; consciente de que tanto la inspiración sublime como el vicio más abyecto han tenido lugar al borde del Sena en distintas noches de luna llena; sabedora de que este ambiente exquisito de la mañana puede convertirse en el centro canalla más tremendo y desolador al ponerse el sol; segura de que a nadie ha de extrañarle que, tanto la literatura como el cine, hayan acudido con tamaña frecuencia a la llamada de esas calles, de ese río, o de ese altivo Molino Rojo, porque Paris siempre será la buhardilla  donde cualquier Olympia que, como Cenicienta haya perdido su mínimo zapato de cristal, puede encontrar un mágico Monet quien, pincel en mano, convierta la sordidez de turbias pesadillas, en el más hermoso e increíble de los sueños.

Me gusta alojarme en Issy les Moulineaux, aunque ahora haya perdido parte de su mimoso encanto pueblerino para convertirse en abanderada de las nuevas tecnologías y, desde la Mairie, después de un croissant que quita el sentido, llegar al centro de Paris, siempre mejor en metro que en el vertiginoso RER, para así ir saboreando el nombre de cada una de las estaciones amigas; Corentin; Porte de Versailles; Convention… hasta llegar, en apenas veinte minutos, a la que casi siempre escojo como cruce de caminos para iniciar mil y una rutas añoradas: Concorde.

domingo, 23 de junio de 2013

VASCO DE QUIROGA

"La madre que no quisiera criar sus hijos, los llevase a aquel hospital donde se criaban con gran cuidado y regalo, dándoles leche, de comer y de vestir todo el tiempo que era necesario". Vasco de Quiroga (1470 - 1565)

DON VASCO DE QUIROGA, SU VIDA Y SUS FUNDACIONES

Después de la caída de Tenochtitlan la corona española, en cuyo nombre se hizo la conquista, ensayó diversas formas de gobierno en el vasto dominio al que habían puesto por nombre la Nueva España. Primero enviaron un gobernador, Cristóbal de Tapia, que fue nulificado por la fuerza incontrastable del conquistador Hernán Cortés. Luego, nombraron al mismo Cortés como gobernador y Capitán General, pero con un aparato burocrático impuesto desde España: los oficiales reales o sea un tesorero, Alonso de Estrada; un contador, Rodrigo de Albornoz; un factor, Alonso de Aguilar; y un veedor, Pedro Almíndez Cherinos [1]. El rey y sus consejeros, decidieron poner fin a los desmanes de Cortés y para ello enviaron un juez de residencia, Luís Ponce de León, quien murió misteriosamente a los diecisiete días de haber llegado a México; quedó en su lugar el inquisidor Marcos de Aguilar, quien murió también, sin haber cumplido su misión; el poder quedó en manos de Estrada. Ante estos sucesos alarmantes, se acordó crear la Audiencia y Cancillería Real, con jurisdicción en Nueva España, Cabo de Honduras, Guatemala, Yucatán, Cozumel, Pánuco, La Florida y Río de las Palmas; y se pensó en el poder de las armas, entregándose la presidencia de la Audiencia en manos de Beltrán Nuño de Guzmán, congénere -aunque enemigo- de Cortés. Se designaron cuatro oidores: los licenciados Martín Ortiz de Matienzo, Alonso de Parada, Diego Delgadillo y Francisco Maldonado. Con los miembros de la Audiencia arribó fray Juan de Zumárraga, electo primer obispo de México y Protector de los indios. A los pocos días de su llegada, murieron Parada y Maldonado. Gobernaron sólo Nuño de Guzmán, Matienzo y Delgadillo, a quienes Pereyra llama "el triunvirato de la inquietud y el desgobierno".

jueves, 6 de junio de 2013

EL MAR Y LA FORMACIÓN HUMANA

El día 13 de enero de 1914 aparecía en el periódico londinense The Times el siguiente anuncio: “Se buscan hombres para viaje peligroso. Sueldo escaso. Frío extremo. Largos meses de completa oscuridad. Peligro constante. No se asegura el regreso. Honor y reconocimiento en caso de éxito”.  El aviso había sido publicado a instancias del explorador Ernest Shackleton (1.874 – 1.922), al objeto de reunir la tripulación necesaria para su proyecto de atravesar el Polo Sur. La posterior gesta que protagonizaría el propio Shackleton junto a las 27 personas finalmente seleccionadas, terminaría por convertirse en uno de los fracasos más exitosos de la historia reciente de la humanidad y en un ejemplo sin parangón de liderazgo y supervivencia en condiciones extremas, que hoy sigue siendo objeto de estudio en escuelas y universidades de todo el mundo. Los 20 meses que pasaron atrapados en el antártico, durante los que recorrieron 554 kilómetros a través de un desierto de hielo, 800 millas sobre mares embravecidos, a bordo de una embarcación que no llegaba a 7 metros de eslora y 35 kilómetros a través de escarpadas montañas heladas, culminaron con el regreso de la expedición y sin que llegara a lamentarse la pérdida de una sola vida humana. Una aventura excepcional llevada a cabo por hombres excepcionales, que quedó inmortalizada a través de las espectaculares imágenes de Frank Hurley, el fotógrafo de la expedición, cuyo impresionante trabajo es igualmente digno de admiración.

Al margen de la sobrecogedora gesta humana vivida por la expedición de Shackleton, desde el primer momento me pareció sorprendente el hecho de que un anuncio redactado en semejantes términos, pudiera reunir en pocos días la friolera de 5.000 solicitudes… hasta que caí en la cuenta de que lo que proponía el texto del anuncio no era demasiado diferente a la realidad que vivían miles de personas en la Inglaterra de aquellos años, especialmente entre el proletariado urbano. De hecho y salvando las distancias, ni siquiera resulta tan diferente de la realidad en la que viven hoy –en la que vivimos hoy- millones de seres humanos en todo el planeta… A los efectos, recuerdo una vez más el texto del anuncio: “…viaje peligroso. Sueldo escaso. Frío extremo. Largos meses de completa oscuridad. Peligro constante. No se asegura el regreso. Honor y reconocimiento en caso de éxito”.

viernes, 31 de mayo de 2013

DOMINAR UN IDIOMA

Fotografía: Rafa Llano
"Escribir es soñar con las manos"
Desde hace muchos años se ha empleado esta locución para dar a entender que se está en plena posesión del conocimiento de un idioma, vernáculo o no. Generalmente, exceptuando al pretencioso de turno, no es el propio interesado sino los demás quienes lo emplean, puesto que los que han dedicado tiempo, capacidad y empeño a la noble tarea de bucear en los entresijos de una lengua, eluden el uso del pomposo sustantivo “dominio” sustituyéndolo por adverbios tales como correcta o fluidamente, acompañados de los verbos hablar y/o escribir.

Quienes estamos habituados a la lectura de currículos varios advertimos el cambio que se ha producido en su redacción en los últimos años. A mediados del siglo veinte los aspirantes a cualquier puesto enumeraban, especificaban y hasta aportaban pruebas evidentes de cuantos méritos les adornaban, mientras que –siempre como coletilla final- incluían de manera poco clara, y casi timoratamente, su nivel de capacidad en uno o varios idiomas extranjeros.  

Quizá debido en parte a nuestro perfil netamente europeo y, más recientemente, a la situación de crisis de nuestro país, en la actualidad las tornas han cambiado y se hace un énfasis evidente en todo lo que respecta al nivel de conocimiento que el individuo en cuestión tiene de otra u otras lenguas. Curiosamente ni entonces ni ahora me he encontrado con que en alguno de estos documentos “el abajo firmante” indicara si conocía en profundidad y convenientemente su propia habla, no sé si dando por sentado que así era, o que para él carecía de importancia el dato. 

domingo, 19 de mayo de 2013

MOHANDAS KARAMCHAND GANDHI

"En la actualidad la gente sólo se preocupa por sus derechos. Recordarle que también tiene deberes y responsabilidades es un acto de valor que no corresponde exclusivamente a los políticos". 
Mahatma Gandhi

MOHANDAS KARAMCHAND GANDHI (1869-1948)

El rechazo del sistema de educación colonial, que la administración británica había establecido a comienzos del siglo XIX en la India, fue una importante característica del fermento intelectual creado por la lucha de liberación. Muchas personalidades indias, entre las que se contaban dirigentes políticos, reformadores sociales y literatos, dieron expresión a ese rechazo. Pero nadie rechazó la educación colonial de modo tan radical y absoluto como Gandhi, ni nadie propuso una alternativa tan extrema como la suya. La crítica de la educación colonial por parte de Gandhi se inserta en su crítica global de la civilización occidental. La colonización, incluido su programa educativo, era para Gandhi la negación de la verdad y de la no violencia, los dos valores para él supremos. El hecho de que los hombres de Occidente hubieran derrochado “toda su energía, su industria y su ingenio en saquear y destruir a otras razas” era prueba suficiente para Gandhi de que la civilización occidental era “un caos lamentable” (2). Por consiguiente, para él no era posible que esa civilización fuera un símbolo del “progreso”, ni nada digno de imitación y transplante en la India.

Sería erróneo interpretar la reacción de Gandhi a la educación colonial como un sentimiento de xenofobia. Igualmente erróneo sería verla como un síntoma de un sutil dogma “revivalista”. Si fuera posible leer el plan de “educación básica” de Gandhi como un texto anónimo de la historia de la educación en el mundo, habría que clasificarlo en la tradición de los humanistas progresistas de Occidente como Pestalozzi, Owen, Tolstoy y Dewey. Ello no nos permite considerarlo en el contexto de la dicotomía civilizadora de Oriente-Occidente de que Gandhi habló en algunos de sus escritos. Y sin embargo, subsiste el hecho de que Gandhi quería que la educación, reinterpretada con arreglo a los criterios que estimaba correctos, ayudase a la India a apartarse del concepto occidental del progreso, hacia una forma distinta de desarrollo a su juicio más adecuada a sus necesidades y más viable -para todo el mundo- que el modelo occidental de desarrollo.

miércoles, 15 de mayo de 2013

SOBRE LA INUTILIDAD DE LOS ANCIANOS

Había una vez, hace muchos, muchos años, un lejano reino que estaba pasando por momentos de dificultad. Durante muchos años la corona se había preocupado por todos sus súbditos, ayudándoles y supliendo sus carencias, llegando donde ellos no llegaban. Pero las arcas del monarca se estaban quedando vacías, comenzaban a estar pobladas por telarañas… Así que el joven consejero del rey, un auténtico genio de los números, mostró al jerarca unos cálculos en los que demostraba que los ancianos suponían un gasto terrible y que, sin embargo, sus limitaciones físicas les impedían aportar ingresos comparables a través del trabajo.

- Debemos deshacernos de los ancianos, majestad- dijo en el frío tono de aquél que no esntiende más que de números y estadísticas-. Nos aportan menos de lo que nos cuestan. Sin ellos, podremos soportar durante más tiempo esta época de necesidad, hasta que lleguen tiempos mejores.

- ¿Quieres decir?-le preguntó el rey-. ¿No habrá otra solución? Yo ya no tengo padre, pero pedir a mis súbditos que se deshagan de ellos no va a ser fácil.

-Apele a su egoísmo, sire. Dígales que, sin los ancianos, los jóvenes podrán vivir mejor, más libres, sin tantas obligaciones… Y disponiendo de muchos más recursos…  Le escucharán, ya lo verá… Además, vos sois el rey… No deis opción, dad la orden si queréis salvar vuestro trono.

Salvar el trono, la corona sobre su cabeza, las monedas de sus arcas… Eso sí que caló en el alma del soberano, y ordenó que se desterrara a todos los ancianos de su reino.  Algunos jóvenes lloraron al separarse de sus padres, otros suspiraron aliviados al deshacerse de aquellos que les habían criado pero que ahora requerían de sus cuidados… Sólo un soldado, Senectus, hizo algo a lo que nadie más se atrevió porque estaba castigado con la tortura y posterior ejecución: ocultó a su anciano y enfermo padre en el desván de su casa, en un cuarto secreto, y siguió ofreciéndole sus cuidados y brindándole su afecto… Cuidando, eso sí, de que nadie se percatara de su presencia.

domingo, 12 de mayo de 2013

EL LIDERAZGO: ¿CÓMO SER UN BUEN LÍDER?

"Allí donde el mando es codiciado y disputado no puede haber buen gobierno ni reinará la concordia". Platón

Pocas épocas tan necesitadas de buenos líderes como esta en la que actualmente vivimos, agitada por una grave crisis y sacudida por acuciantes problemas de todo orden. Pero pocas también tan ayunas de liderazgo auténtico, tan escasas de dirigentes como Dios manda. No se puede decir precisamente que los buenos líderes, los auténticos dirigentes, abunden en nuestros días, aunque haya tantos que aspiren a ser tal cosa o pretendan ser jefes carismáticos. Poco propicios parecen los tiempos que corren para la figura ejemplar, noble, ética, heroica, del conductor de hombres.

Hoy día todo el mundo quiere ser jefe de algo, detentar alguna parcela de poder, liderar lo que sea, como sea y para lo que sea; sobre todo, claro está, para enriquecerse, presumir y sentirse importante, en una palabra, para satisfacer su ego. Hasta el último mono se cree un líder nato, facultado para asumir un cargo directivo, conducir masas, ponerse al frente de un partido político, dirigir grandes empresas o montar una revolución. Pocos son, sin embargo, los que se plantean en serio si reúnen las condiciones para desempeñar el duro y difícil oficio de líder, y menos aún los que están dispuestos a imponerse la disciplina requerida para la conquista de las cualidades exigidas para ello. Cualquiera se cree legitimado para dirigir, sin más requisitos que su apetencia y deseo de hacerlo. Todos quieren ser líderes, pero nadie está dispuesto a hacer el esfuerzo que la función de liderazgo requiere.

Una constatación se impone con palmaria evidencia: las pretensiones al liderazgo proliferan justo en proporción inversa a las dotes para dirigir, a las virtudes que cualifican para el mando. Cuanto menos capacitado está uno para mandar o dirigir, con mayor vehemencia proclama su derecho a hacerlo; cuanto más indigno se muestra un individuo de ocupar un puesto dirigente, más se obstina en conseguirlo o en mantenerse en él. Es la ambición de poder lo que motiva ese frenesí por mandar; pero, de hecho, y esta es otra constatación cotidiana, a medida que el afán de poder aumenta en alguien, disminuye su capacidad de liderazgo.

Pero, a todo esto, ¿qué se necesita para ser un buen líder?, ¿cuándo se puede decir que nos encontramos ante un liderazgo bien ejercido o ante un individuo que responde al modelo del líder nato, del dirigente perfecto?

miércoles, 8 de mayo de 2013

15 DE ABRIL DE 1963: SANTOS ANASTASIA Y TELMO

Aquel quince de abril de 1963 era lunes. Al parecer un lunes sin más, laborable, primaveral y soleado como tantos otros del año. Precisamente el día anterior había sido el aniversario de la muerte de Lincoln, y faltaban pocos meses para que el mundo se paralizara de terror al presenciar, atónito e impotente ante las pantallas del televisor, el tiroteo y muerte en blanco y negro de otro atractivo Presidente americano, joven, eficaz  y luchador que, no hacía tanto, salía airoso de uno de los más terribles episodios de la llamada guerra fría que a punto estuvo de mandarnos a todos al garete, y que fue  conocido popularmente como “ el asunto de los misiles cubanos”.

El Papa bueno, y además valiente, acababa de publicar la que sería su última encíclica “Pacem in Terris”, que no solo hablaba de paz, sino de justicia social, derechos laborales, presencia de la mujer en la vida pública y un largo etcétera de asuntos aún pendientes pero no por ello menos necesarios  para la convivencia entre seres humanos, y que no estaría de más releyéramos en estos turbulentos tiempos del nuevo siglo en el que el exclusivo y excluyente protagonismo de ruina económica y de quiebra de valores que nos toca vivir, nos hace olvidar otras épocas duras y difíciles en las que a fuerza de ilusión, empeño y sacrificio conseguíamos cada día y entre todos rehacer los pedazos de una España mermada y sufrida, silenciosa en su tarea cotidiana de reinventar la concordia y conservar la paz.

jueves, 25 de abril de 2013

UNAMUNO

"Obra de modo que merezcas a tu propio juicio y a juicio de los demás la eternidad, que te hagas insustituible, que no merezcas morir". Miguel de Unamuno

Departiré de un escritor-filósofo considerado como el máximo representante de la “Generación del 98”, Miguel de Unamuno y Jugo. Imaginemos a don Miguel con las perneras del pantalón abombadas por las rodillas, y su chaleco de lana hasta el cuello, haciéndolo así, lo estaremos viendo como realmente parecía.

Miguel nació el 29 de septiembre de 1864 en la calle Ronda de Bilbao. Al acabar sus estudios primarios en el Colegio San Nicolás, pasó al Instituto bilbaíno donde viviría la experiencia del asedio de la ciudad durante la Tercera Guerra Carlista. Sin embargo, fueron, quizás, los momentos más felices de su mocedad: se pasaba el día jugando y tras los bombardeos, entraba en las iglesias semidestruidas para juguetear entre sus naves. Sobre todas estas peripecias, confeccionaría años después su primera novela “Paz en la Guerra”; pero todavía no es el momento de hablar de su obra…

En septiembre de 1880 se matricula en la Universidad de Madrid para estudiar Filosofía y  Letras. Al cumplir diecinueve años, finaliza sus estudios con la calificación de sobresaliente. En 1888 oposita a la  cátedra de Lengua Griega en la Universidad de Salamanca que obtiene en primera instancia. En 1901 sería elegido rector de dicha Universidad. Toda su vida fue crítico de los distintos regímenes políticos en los que vivió, y, como consecuencia de su oposición a la dictadura de Primo de Rivera, fue desterrado a Fuerteventura; de allí logró escapar y se exilió voluntariamente a Hendaya (Francia). Tras la caída del dictador, vuelve triunfalmente a España y fue diputado durante la II República. Siempre fue rebelde, y no encontró nunca la paz atormentado por dudas religiosas y existenciales, su vida tuvo una gran actividad intelectual de incesante lucha con su propio ser.

martes, 16 de abril de 2013

TERRORISMO DE SALÓN

"Cuanto más se prolongue la violencia, tanto más difícil les resulta, a aquellos que la han empleado, encontrar la forma de realizar actos compensatorios no violentos. Se crea una tradición de violencia y los hombres aceptan escalas de valores, de acuerdo con las cuáles los actos de violencia se computan como hechos heroicos o virtuosos". Aldous Huxley

Las víctimas del terrorismo son siempre víctimas. No importa en qué lugar del mundo o bajo qué bandera mueran. En el dolor extremo no hay grados: ni se puede morir más, ni se puede morir menos. 

Matar a otro ser humano o emplear con él la violencia extrema, es sencillamente algo execrable, especialmente cuando se lleva a cabo desde la premeditación, la frialdad y una actitud despiadada. La finalidad del terrorismo y del terrorista no es otra más que la de aterrorizar a una sola persona, a un grupo o a toda una sociedad, para tratar de obtener por medio de la coacción y el terror lo que las urnas, las leyes o la razón no les conceden. Con frecuencia los objetivos son además inconfesables y pasan por algo tan miserable y material como el dinero, o tan mezquino como el poder, el odio o el sectarismo político. Nada justifica semejante forma de actuar; nada es tan contrario al Bien Común, ni vale tanto, como la vida de un sólo Ser Humano. 

Más allá de la propia conducta criminal de los asesinos que llevan a cabo los actos de terrorismo, quienes defienden, amparan, toleran, apoyan o participan -aunque sea indirectamente- de forma activa o pasiva en semejante indignidad, merecen igualmente el más firme rechazo social y la acción implacable de la justicia. También los que incitan a ello desde las brumas subjetivas de su razón o la supuesta bondad de una causa que, sin saberlo o premeditadamente, les lleva a terminar deambulando, ebrios de torpeza, sobre esa delgada línea invisible, pero presente, que separa la armonía y la convivencia pacífica del caos y la guerra. Son terroristas de red social, de calles incendiadas y asaltos al Congreso; terroristas de salón. De guante blanco. Terroristas de insultos y amenazas; de acoso disfrazado de "escrache". De conciencia ausente.

sábado, 6 de abril de 2013

¡VIVE!


"En el sentimiento del amor existe algo singular capaz de resolver todas las contradicciones de la vida y de dar al hombre aquella felicidad total cuya consecución es el fin de la vida".
León Tolstoi

La descomposición de nuestra sociedad es el resultado de haber hecho de la incoherencia la norma, del egoísmo un motivo y del odio un voto.

Desde esa postura, hay quien convierte su vida en una reivindicación permanente en favor de un mal entendido concepto de libertad, sin darse cuenta de que, en realidad, ellos son los que se han convertido en esclavos de la sinrazón, de la mentira, del cinismo y hasta de su propia necedad. Sin darse cuenta de que la verdadera independencia es la que se consigue mediante el pensamiento crítico y la búsqueda permanente de la verdad, no en base a la que proporcionan las barreras físicas, idiomáticas, culturales o a través de la enajenación de un pedazo de tierra.

Olvidan que promover la confrontación y recurrir a la violencia, al insulto o a la amenza, desautoriza moralmente aquello que reivindican. Olvidan que, en el mejor de los casos, la supuesta bondad de una determinada causa no es un argumento válido para obviar o llegar a omitir los aspectos éticos de nuestros actos. Olvidan, seguramente, que la sostenibilidad de nuestro bienestar personal depende de la consecución del Bien Común, de nuestro amor hacia los demás y que nuestro peor enemigo es, precisamente, todo ese egoísmo exacerbado. Solamente quien logra dominar al dragón del Yo hipertrofiado, empieza a descubrir la verdadera belleza de la vida y lo sencillo que puede resultar alcanzar la felicidad.

Vive y deja vivir. Vive y haz más fácil la vida a los demás. Vive y ayuda a que otros también puedan vivir con dignidad y desde la verdadera libertad... ¡VIVE!

Por Alberto de Zunzunegui

viernes, 29 de marzo de 2013

¡VOCABOR FRANCISCUS!

Había pasado más de una hora lluviosa desde que el humo blanco anunciara la buena nueva. La Plaza de San Pedro era un hervidero de paraguas multicolores bajo los que aguardaban los rostros esperanzados de cientos de seres humanos que alzaban los ojos, impacientes por ver abrirse las puertas del balcón por el que haría su aparición el nuevo Obispo de Roma y Guía espiritual de la Iglesia Católica.

Curiosamente todos los rostros parecían contentos a pesar de desconocer quién iba a calzar, a partir de ahora, las sandalias del Pescador. En verdad pensé, ésta no es una elección al uso. La mayoría de los presentes habría sido bautizada, pero muchos de ellos a duras penas cumplirían con los Mandamientos de la Iglesia. Escasamente un puñado de los presentes conseguiría algún beneficio material fuera quien fuese el elegido; nadie de entre ellos habría podido votar a su candidato favorito; ninguno era conocedor de su programa de actuaciones; no habían visto su rostro repetido hasta la saciedad en los medios de comunicación ni habían escuchado sus promesas, y ni tan siquiera conocían a sus adversarios, si es que los tenía; no contaban por tanto con el menor dato orientativo que justificara su permanencia allí en medio de aquel gentío en esa tarde de perros, ni mucho menos era fácil de entender que todos ellos compartieran esa sensación de paz interior, de alegría compartida, de ilusión colegiada que se mascaba… pero allí estaban.

sábado, 23 de marzo de 2013

TUNEZ: ESTADO DE EMERGENCIA

Se ha abierto una brecha profunda entre el movimiento islamista de Ennahda, capitaneado por Rachid al-Gannouchi, y las tendencias liberales después del asesinato del abogado y dirigente del “Partido de los Patriotas Demócratas Unidos” (PPDU), Mohamed Chokri Belaid de 49 años de edad. Le dispararon a bocajarro mientras salía de su casa. Un crimen horrendo y aterrador, que ha sembrado de incertidumbre, dudas y miedo el futuro político del país. Su muerte violenta a manos de pistoleros atemorizó a la población, que quiso mostrar su apoyo popular a las ideas liberales de Chokri Belaid. Fue un sepelio multitudinario con la presencia del primer ministro Hamadi Jbali. Rompiendo con la tradición musulmana muchas mujeres acudieron a dar el último ila lilqa’ (“Hasta que nos encontremos”) en la Casa de la Cultura del barrio Djebel Jelloud en el sur de la capital. De allí salió la procesión de al menos 50.000 personas hasta el cementerio de al-Jellez. Se oyeron gritos de rabia y gemidos de ira contra el terrorismo, los islamistas y los opositores de la revolución. “Ghannouchi traidor”, “Ghannouchi coge tus perros y márchate”, “Pan y agua, no a Ennahda”, “El pueblo quiere una nueva revolución”, “El pueblo quiere la caída del régimen”, eran algunos de las expresiones de cólera que hacían de eco en la procesión multitudinaria que conducía el féretro al cementerio.

viernes, 15 de marzo de 2013

LORCA EN EL RECUERDO

Han pasado casi dos años desde aquél once de mayo en el que la tierra tembló y volvió a temblar bajo los pies de los lorquinos; desde que nueve de sus vecinos perdieran la vida; desde que las gentes, con el terror en la mirada, deambularan con sus maletas por las calles durante el día y durmieran en sus vehículos, o en el refugio habilitado para ello, por temor de que sus casas se vinieran abajo; desde que los niños dejaran de tener escuela; desde que las estructuras mostraran serios daños; desde que la preciosa botica del palacio de Guevara oyera, a más de su famoso fantasma de medianoche, el temido vaivén de sus preciosos tarros en peligro de muerte; desde que el perfil de uno de los cascos históricos señeros del barroco español, viera borrarse de un plumazo todo un conjunto de nobles casas solariegas, reducidas a fachadas fantasmagóricas; desde que las puertas y ventanas de muchas de ellas solo permitieran el acceso a los escombros… a la nada.

En los primeros momentos había que salvar vidas antes que haciendas, había que restaurar el espíritu y la carne antes que la piedra y el patrimonio, por lo que sin pérdida de tiempo, más de cuatrocientos soldados entre la Unidad de Emergencias y el Ejército de tierra acudieron en socorro, trasladando heridos, habilitando alojamientos, acordonando edificios, cumpliendo, en fin, con su deber más allá de lo exigible, mientras que distintas ONGS restañaban los ánimos, secaban lágrimas y cuidaban de que los pequeños volvieran tímidamente a sonreír. Más tarde comenzó la recuperación de esta ciudad hermosa por sus cuatro costados, que presentaba, por vez primera desde los bombardeos de la contienda fratricida del 36, una imagen dañada, agrietada y herida hasta donde la vista alcanzaba.

lunes, 11 de marzo de 2013

TODAVÍA EXISTEN SOFISTAS

Herodes Atticus (101 - 177 d.C.)
El sofismo, dice que ninguna actuación puede ser considerada "buena ni "mala" en sí misma. Que todo depende de la "opinión" (dóxa) de los sujetos. Es moralmente bueno lo que a ellos les parece moralmente bueno, mas sólo durante el tiempo en que se lo parece. Y no existe –dicen- ninguna conducta que pueda ser considerada en sí mima censurable. Los primeros que ejercieron la profesión de sofistas, se limitaban a las letras y las ciencias humanas, pero dejaron al margen la religión. Se abstuvieron de disputar sobre cosas en que cualquier decisión pudiera conmover a la gente común del pueblo.                                                                

La palabra sophistes significaba maestro en sabiduría. Y como tales se presentaban, simulaban saber, de todo: astronomía, geometría, aritmética, música, pintura… Pero no buscaban la verdad, sino mostrar su apariencia de saber porque esta apariencia, les revestía de cierta autoridad. Enseñaban el “areté” para quedar a la altura de las circunstancias políticas de su época. La palabra areté, traducida generalmente como virtud, no tenía entonces las connotaciones morales que la virtud tiene ahora. “Areté” era "lo que es propio de". Y eso era el dominio de las palabras para ser capaces de persuadir a otros. De "Poder convertir en fuertes los argumentos más débiles", diría Protágoras que decía también que con las palabras se puede “tanto envenenar como embelesar”.

lunes, 25 de febrero de 2013

MENTIRAS ARRIESGADAS

Estamos asistiendo, no sé si conscientemente o no, a un peligroso juego que se va introduciendo en nuestros hogares a través de las redes sociales, los medios de comunicación y, si me apuran, del pensamiento y posterior discurso diario de tirios y troyanos, y este juego no es otro que el del uso y hasta abuso impune e indecente de la mentira. Si nos fijamos bien, la falta de veracidad y el engaño comienzan muy de mañana cuando en-cendemos la radio o el televisor. Las campañas publicitarias se adueñan de las ondas, alargando la duración de las cuñas, para soltarnos unos rollos pseudo-filosóficos de lo más irrisorio que convierten en auténtica hazaña entender qué es lo que nos ofrecen y, no  contentos con eso, señalan una serie de cualidades y beneficios inherentes a los productos anunciados que  faltan a la verdad, prometiendo resultados de comodidad, duración, retorno a la juventud, eficacia o satisfacción que rara vez se cumplen, cuando no atentan contra la salud o el bolsillo del incauto comprador que contempla desolado como su pelo no aumenta, su piel  de naranja no disminuye, el aspirador no limpia solo, el quita-manchas no hace milagros, sus líneas de expresión siguen siendo las arrugas de siempre y acaba como Marcel Proust. buscando una y otra vez su tiempo- y su dinero- perdido.

Como esta situación se produce a lo largo de los años sin el debido castigo, la mentira da un paso más y al abrir el ordenador comienzan a entrar, a velocidad desaforada, correos de empresas o particulares semiocultos, a los que nunca nos hemos dirigido y que, sin embargo, disponen de nuestros datos como si fueran de la familia. En esos correos, y me estoy refiriendo a los aparentemente inocentes que nada tienen que ver con la criminología cibernética, -que haberla hayla-, unos desaprensivos apelan a nuestra conciencia, para conseguir nuevas direcciones de incautos, asegurándonos que hay alguien enfermo o necesitado el cual, gracias a nuestra contribución difusora del mensaje, va a curarse; a solucionar su problema o a salir del entuerto en cuestión. En la mayoría de los casos no hay persona en apuros, ni enfermedad alguna ni problema real, solo hay… otra perversa mentira.

lunes, 18 de febrero de 2013

EL CANSANCIO MODERNO DE LA VIDA

"Abandonar puede tener justificación; abandonarse jamás".
Fotografía de Rafa Llano
Cuando D. Guillermo Trebín me honró pidiéndome que pronunciase una conferencia en los cada vez más afamados “Lunes de Ginzo”, acepté por supuesto, ilusionado como tantas otras veces, y elegí algo que tuviera interés general. Dado que tenía la oportunidad de dirigirme a ustedes, no iba a desaprovecharla dándoles un discurso sobre el Raciocinio, por ejemplo. Consideré que eso sería perder el tiempo, ya que explicarles una materia tan compleja, requeriría todo un curso y no una conferencia de 50 minutos.  Otra opción hubiera sido dar lo que se denomina una charla divulgativa, es decir, “algo” que intentara hacerle creer a ustedes, personas formadas y con experiencia, que  ya entienden de algo más que realmente no entienden, satisfaciendo así lo que considero uno de las más bajas pretensiones de la gente moderna, es decir, una curiosidad superficial acerca de los  nuevos conocimientos.

Rechacé, pues, ambas alternativas y decidí hablarles sobre un asunto que es esencial para todos, con la esperanza de que ello les ayude a aclarar sus ideas acerca del mismo, incluso en el caso de que estén en total desacuerdo con lo que yo vaya a decirles, por lo que, como se decía antiguamente, cuento con su comprensión y benevolencia.

Los estrés –que ya saben ustedes de que se trata - y las “estenias”, que son los cansancios corporales y mentales de cualquier tipo, constituyen los burladeros recurrentes de este tiempo, en los que siempre nos refugiamos. Pero lo cierto es que este mundo, empeñado en crear un ambiente confortable es, muy por el contrario, un mundo que cansa. Y téngase en cuenta que el cansancio moderno de la vida es mucho más que la adición de los cansancios físicos que nos cansan, como iremos viendo.

jueves, 14 de febrero de 2013

DE CRISTIANOS; LIBERALES Y EDUCACIÓN

John Locke (1632 - 1704)
"Educar a un niño no es hacerle aprender algo que no sabía, sino hacer de él alguien que no existía". John Ruskin

En las últimas semanas, a raíz de la presentación del Anteproyecto de Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa, ha vuelto a abrirse la caja de los truenos, y las voces en pro y en contra, no sé si con la suficiente y debida información, han empuñado pancartas y altavoces, únicas armas que deben esgrimir en democracia los manifestantes, por todo lo ancho y largo de España, teniendo una especial incidencia en parte de nuestras Comunidades a las que afecta de algún modo la regulación absurdamente problemática, de la cooficialidad de lenguas. Mantengo la esperanza de que todos los implicados lleguen con conocimiento de causa y sin mentiras veladas, a acuerdos beneficiosos para las partes pero, sobre todo, permanezco en mis trece en el sentido de que de poco servirá todo el complejo entramado que conforma el proceso educativo si, entre todos los agentes, no se consigue implicar, entusiasmar y yo diría que atrapar al único protagonista de excepción: el educando, hasta conseguir que la sed de aprendizaje se incardine en su vida de tal manera que, tras haber pasado por todas las etapas establecidas para su formación pedagógica, esté convencido de que siempre es menos lo que sabe que lo que ignora, y, por tanto, deberá ocuparse y preocuparse por seguir aprendiendo mientras le quede un aliento de vida. Y eso se puede aplicar en cualquiera de las etapas vitales del ser humano, incluida, por supuesto la edad adulta. Quiero romper una lanza por la educación de y para mayores, que está cumpliendo una extraordinaria función en este nuevo siglo, ante la celeridad de los múltiples cambios económicos, sociales y tecnológicos que se van produciendo sin solución de continuidad. Ahora, más que nunca, necesitamos una permanente puesta al día para poder estar a la altura de aquellos a quienes pretendemos enseñar.

viernes, 8 de febrero de 2013

EL "MATRIMONIO HOMOSEXUAL" (5/5): LA FUNCIÓN DE LAS LEYES. CONCLUSIONES

LA FUNCIÓN DE LAS LEYES EN UNA SOCIEDAD DEMOCRÁTICA

La última cuestión de fondo que subyace en el debate en torno al “matrimonio homosexual” y a su regulación legal es, precisamente, el de para qué sirven las leyes, el de cuál es su función en una sociedad democrática.

En la ya famosa sentencia del TC sobre el “matrimonio homosexual” los magistrados hacen referencia a dos nociones que me parecen importantes: la idea de que el texto constitucional debe ser interpretado a la luz de los problemas y las circunstancias actuales para no convertirse en letra muerta, y el convencimiento de que la ley debe doblegarse a la realidad social, a la estadística.  Vayamos por partes porque la cuestión es más importante y profunda de lo que parece… 

jueves, 7 de febrero de 2013

EL "MATRIMONIO HOMOSEXUAL" (4/5): ¿DEBE PERMITIRSE LA ADOPCIÓN A PAREJAS DEL MISMO SEXO?

Esta cuestión es una de las que más habitualmente crea conflictos al tratar de dialogar en torno al “matrimonio homosexual”, y encona las posiciones en torno al mismo. De hecho, en más de una ocasión he oído y leído el razonamiento de “a mí me parece bien que hagan lo que quieran con sus vidas, no tengo nada contra los homosexuales… Pero no quiero que se les permita casarse porque el siguiente paso será el exigir el derecho a adoptar, y eso ya afecta a una tercera persona… Que además es menor”.

Esa simple frase, que supongo que también tú habrás escuchado en alguna ocasión, contiene mucho más de lo que parece: comienza manifestando una valoración negativa de la homosexualidad (a la que se tolera en atención al respeto a la libertad humana), a continuación se relaciona el matrimonio con el “derecho” a adoptar (¿están realmente relacionados? Y, ¿es realmente la adopción –o la maternidad/paternidad- un derecho?) y, finalmente, se pone indirectamente sobre la mesa la cuestión de si tener unos progenitores homosexuales puede influir o condicionar la orientación o elección sexual del menor.

jueves, 31 de enero de 2013

EL "MATRIMONIO HOMOSEXUAL" (3/5): NOCIÓN Y FINES DEL MATRIMONIO

Va resultar difícil que lleguemos a un punto de encuentro respecto al “matrimonio homosexual” si no nos ponemos de acuerdo, antes, en nuestro modo de entender y valorar sus principales elementos constitutivos: el matrimonio y la homosexualidad. Sobre ésta última ya tratamos ayer así que hoy vamos a tratar de dar unas pinceladas sobre los distintas visiones que existen en la actualidad sobre el matrimonio, y la influencia que tienen sobre el debate que nos ocupa: el del “matrimonio homosexual”.

No voy a realizar una aproximación histórica al matrimonio, no creo que sea el momento de hacer arqueología conceptual sino de observar, sintetizar y valorar qué se entiende a día de hoy por matrimonio, y que queremos que se entienda por tal el día de mañana.

sábado, 26 de enero de 2013

EL "MATRIMONIO HOMOSEXUAL" (2/5): LA VALORACIÓN DE LA HOMOSEXUALIDAD, ¿LIBRE ELECCIÓN O ENFERMEDAD?

Para no perder el hilo de este discurso, quisiera comenzar recordando que estamos tratando sobre cinco cuestiones de fondo que condicionan la postura de cada uno de nosotros sobre el “matrimonio homosexual” y que, por suerte o por desgracia (más bien por desgracia que por suerte), no siempre se manifiestan de forma consciente ni se ponen encima de la mesa.

Decíamos ayer que la visión que tengamos de la sexualidad -de su naturaleza y función- tiene una gran trascendencia a la hora de tomar postura ante el “matrimonio homosexual” y, añado hoy, también a la hora de valorar la propia homosexualidad.

Vaya por delante -para que no haya dudas ni malos entendidos- que vamos a valorar la homosexualidad, no a los homosexuales. La persona es mucho más que su condición sexual, por lo que no se la puede definir ni valorar solamente en función de ésta… Entre los homosexuales (como entre los heterosexuales) hay fantásticas personas, y otras a las que es mejor mantener a una distancia de seguridad si no queremos resultar dañados. Pero, repito, no vamos a valorar a la persona, sino a la homosexualidad en sí misma.

miércoles, 23 de enero de 2013

EL "MATRIMONIO HOMOSEXUAL" (1/5): INTRODUCCIÓN. LA SEXUALIDAD HUMANA

INTRODUCCIÓN

La semana pasada, a través de Twitter, @AndrsOlmo me preguntó si podría escribir un artículo sobre el matrimonio homosexual… Y, después de planteármelo,  le respondí que sí. Aquí tenéis el resultado tras varios días de estudio y meditación. No tengo muy claro que sea lo que él esperaba, pero éste es el fruto de mis andanzas.

Aunque no es la primera vez que lo digo, suelo evitar los temas de actualidad, los que se encuentran en el candelero, porque dan lugar a mucho debate y a muy poco diálogo, a una lucha encarnizada de argumentos (muchas veces superficiales y demagógicos) y a muy poca reflexión o búsqueda compartida de lo Verdadero, Bueno y Bello.

Sin embargo, es posible que este intento de situar la discusión en otro plano ayude a algunos a plantearse este tema (y tantos otros) desde otra perspectiva, más profunda, más humana.

domingo, 30 de diciembre de 2012

EL ARTE DE NUESTRO TIEMPO

Reseña Literaria"ESTÉTICA DE LO PEOR",  de José Luis Pardo. Ediciones Barataria, 2011, 304 págs. ISBN: 9788492979080.

En su ensayo What is Minor Poetry? [The Sewanee Review, vol. 54, n.º 1, enero-marzo de 1946, pp. 1-18], T. S. Eliot definió como "poeta mayor" a aquel que requiere como contexto obligatorio para la comprensión cabal de cada uno de sus poemas, a fin de apreciar plenamente cada fracción, la lectura entera –o de gran parte– de su obra. Y reservaba la etiqueta de ‘poeta menor’ para todo aquel que puede conocerse sin menoscabo tan sólo de antologías o por cualquier otra fuente de lectura parcial. Si se aplica esta clasificación de Eliot al actual pensamiento español, no hay duda de que José Luis Pardo es un ensayista mayor. Es cierto que cada uno de sus textos tiene autonomía plena, pero se ensambla y se agranda en el conjunto de su obra toda iniciada en 1978 con Transversales. Textos sobre los textos, ultimada con El cuerpo sin órganos (2011) o Políticas de la intimidad: ensayo sobre la falta de excepciones (2012) y jalonada con reconocimientos como el Premio Nacional de Ensayo por La regla del juego. Sobre la dificultad de aprender filosofía (2005).

Que un buen autor coleccione en un volumen textos suyos que publicó in altra sede, beneficia a todos. Al lector, porque de un solo andar por el monte a caza, cobra en su zurrón numerosas piezas que, de otro modo, le hubieran obligado a numerosos ojeos; a la editorial, porque aumenta su catálogo sin contar con la siempre delicada gestión de un original; y al autor, porque puede mostrar envueltos en odres nuevos, cuando han añejado bien, unos textos complementarios y convergentes que dan idea de una coherencia de pensamiento y de una continuidad de meditaciones. Así, por ejemplo, algunos de estos ensayos, que tratan lato sensu sobre el sentido del arte en el mundo actual, conectan, por ejemplo y sobre todo, con su Nunca fue tan hermosa la basura (2010), en especial con la primera de sus partes: “A cualquier cosa llaman arte”.

jueves, 27 de diciembre de 2012

FRAY ANTONIO DE GUEVARA

"Digo y afirmo que es y será maldito de los dioses y aborrecido de los hombres el que sin más consideración quiere trocar la fama con la infamia, la justicia con la injusticia, la rectitud con la tiranía, la verdad por la mentira, lo cierto por lo dudoso, teniendo aborrecimiento de lo suyo propio y estando suspirando por lo que es ajeno". Antonio de Guevara (Relox de Príncipes)

I. Noticia Biográfica

Perteneció Fray Antonio (1) a la ilustre casa de Guevara, de abolengo vascongado tan distinguido que contó entre sus hijos a quienes, por elección de las hermandades de la Cofradía de Arriaga, fueron señores de Álava. Por el matrimonio, efectuado en el siglo XIV, de Don Beltrán de Guevara, Señor de Oñate, con Doña Mencía de Ayala, hija de Doña Elvira Álvarez de Ceballos y nieta de Diego Gutiérrez de Ceballos, adquirieron los Guevaras los estados y derechos de la casa de Ceballos, heredadísima en la Montaña.

Fue Fray Antonio hijo segundo de Don Beltrán de Guevara, Gobernador de los estados que poseía en la Montaña su hermano mayorazgo Don Ladrón de Guevara, Señor de Escalante y de Treceño, mayordomo de la Princesa Doña Juana y Capitán General de las Reales Galeras; y de Doña Elvira de Noroña Calderón, dama de la Reina Doña Isabel la Católica, y también de estirpe montañesa, de San Vicente de la Barquera.

Debió de nacer Fray Antonio en el año 1480: porque, escribiendo desde Valencia, el 12 de febrero de 1524, a Don Alonso Espinel, [440] Corregidor de Oviedo, dice: "De mi Señor os se dezir que he hecho recuento con mis años, y hallo por mis memoriales, que he los cuarenta y cuatro cumplidos". (2)

Respecto al lugar del nacimiento de Fray Antonio se ha discutido: en el siglo XIX por Don Martín de los Heros y Don Francisco Juan de Ayala; y en el actual por los señores Martínez Caso-López, San Pelayo, Lezama-Leguizamón, Huidobro, Quadra-Salcedo y González de Echávarri, teniéndole unos por montañés y otros por alavés. En 1914 dirimió la contienda la Real Academia de la Historia, aprobando un informe, suscrito por los Señores Barón de la Vega de Hoz y Marqués de Laurencín, que decía: "Entendemos, pues, que fue (Fray Antonio de Guevara) montañés de nacimiento y vasco de origen". (3)

domingo, 16 de diciembre de 2012

AROMAS DE MISTERIO

En las ciudades milenarias siempre hay recintos amurallados en los que el polvo del camino, la suciedad, el descuido y la pobreza,  se convierten en coprotagonistas involuntarios del recuerdo. Aquí en Oriente Medio sucede algo parecido pero suavizado, porque los tejidos gastados y descoloridos de las chilabas y yihabs árabes se mezclan con el arco iris de los mil y un artículos de sus apretados comercios que, en interminables hileras van ofreciendo, junto al brillo dorado, plateado y cobrizo de un sin fin de emblemas religiosos o cachivaches laicos de dudosa utilidad, sus tejidos bordados, recamados, orlados y adornados en un millar de tonalidades llamativas y alegres, entre aromas de azafrán, anís, menta, cilantro comino o incienso que, desde los recovecos insospechados de angostas calles, despiertan nuestros sentidos y envuelven nuestro laberíntico deambular mañanero. Las sonrisas de los niños judíos, musulmanes o cristianos, todos ellos cuidados, protegidos y uniformados, a los que se respeta y quiere por encima de todo, viajan a estas horas tempranas a nuestro lado. Son cientos de ojos, en su mayoría de un negro profundo, que nos miran curiosos cuando, muy de mañana de camino a la escuela, se encuentran con nosotros. Sé que en este viaje no podré detenerme a charlar con ellos, ni con nadie y eso me duele porque los paisajes siempre son mudos e inexpresivos cuando no hay contacto verbal con sus gentes y la perspectiva queda incompleta, cuando no distorsionada.

Y para ellos ¿qué soy yo para ellos? Tan solo una mirada más entre todas las miradas de las gentes que acuden a su tierra, porque muchos de estos pequeños todavía ignoran que para millones de seres humanos su raíz y su fin no tienen más norte ni guía que estas piedras pulidas por el tiempo y teñidas con la sangre de todas las así llamadas civilizaciones que fueron construyendo y destruyendo poblaciones; arrasando y edificando preciosas y preciadas obras de arte; matando y engendrando seres humanos; levantando y derrumbando símbolos, confirmando o renegando de creencias y doctrinas; luchando, en fin, con las armas menos adecuadas, las de la guerra, por preservar la fe que defendían, cada uno en nombre del que para ellos era el único dios. Estos sufridos parajes reciben desde hace milenios el nombre de Tierra Santa y por ellos caminaron, hace ya una eternidad, David en nombre de Yahvé, Mohamed profeta de Alá, y Jesucristo quien, para los cristianos, fue y es la encarnación del Hijo de Dios.